lunes, 27 de octubre de 2008

UN SUEÑO...




Anoche apagué la luz
Tú estabas descalzo
Al margen de una ola escurridiza


Tus pies eran raíces en la arena
El ojo del mundo parpadeó sobre ti
Respirabas entre ecos
Y las sirenas callaron para oírte


Tus labios de cal
Pronunciaron mi nombre sin pasado
El mar abrió sus fauces
Y te entregó un caracol azul

Entonces bailaste como aquel verano
Con las ropas mojadas de tanta brisa
Te reías con un dolor
Clavado entre dos costillas

Anoche te toqué
Tú piel dolía
Estabas hecho de sal y arena
Tus ojos tenían la densidad de una nube gris

Y amaneció
Te desmoronaste con la espuma
La ventana de tu mundo nuevamente se cerró

Respiré otra vez ese aire venenoso
Que lo inunda todo al despertar

Mi cuarto era el puño de un gigante
Otro día inmóvil comenzó
Con la garganta cerrada hasta la asfixia
Esa misma asfixia que me compartes
Desde tú sepulcro

sábado, 18 de octubre de 2008


Hacía tanto frío que decidió salir de su casa. Se quitó los guantes, la bufanda y se enfrentó al verano.

miércoles, 15 de octubre de 2008

Mini-ficción


Bendita Cirugía

−Mire Abajo. ¿Qué observa?
−Unos cuantos colores
−A ver, ¿así?
−Veo manchas rojas.
−¿Y así?
−Grises
−¿Y ahora?
−Blanco, Abajo es blanco.
−¿Está mejor de esta forma?
−Sí. Así está mejor.
−¿Qué aprecia?
−Nada, no veo nada.
−Listo. Señor Jesús, la operación fue un éxito.

NOTA: La imagen fue tomada del blog, http://www.lashistorias.com.mx/ de Alberto Chimal

miércoles, 8 de octubre de 2008

Soy



Soy ésa a la que el espejo ya no mira de frente

Soy el pecado que asoma a través de mis costillas y mis tacones raspados


Soy la que camina descalza bajo el crujir de alfombras baratas

La que todos miran mojándose los labios

Pestañeando las formas en que han de verme de cerca


Diletante de cosas pasadas y huecas

Mientras aletean sobre mi cuerpo mil cuervos


Soy la perfección de la soledad pausada

De las deshoras, del ayuno y las madrugadas.


Soy la turbulencia que se calma cuando toca tierra antigua

Esa tierra de siempre que me aprisiona entre sus tumbas.


Soy el oropel que se compra en una esquina

El billete falso, el golpe seco

Soy la que tiene a todos

La que tiene nada

Cuando el cuarto está alumbrado.